El HSV-2 Swift era un catamarán de alta velocidad construido por la compañía australiana Incat y alquilado por el Military Sealift Command de la US Navy entre los años 2003 y 2013, como parte del desarrollo de la clase Spearhead, una serie de buques cuya misión es el transporte a alta velocidad de tropas, vehículos militares, carga y equipos, para dar apoyo a misiones tanto militares como humanitarias.

Dado de baja del servicio de la US Navy en 2013, el buque fue devuelto a Incat, y ya en 2015, alquilado a la marina de los Emiratos Árabes Unidos. El 1 de octubre de 2016, el Swift recibió un ataque con misiles en Yemen, que, aunque no llegó a hundirlo, sí lo dejó seriamente dañado.

El éxito del HMAS Jervis Bay durante los dos años que la marina australiana lo utilizó para transportar tropas y ayuda humanitaria durante la crisis de Timor Oriental de 1999, llevaron a la US Navy a explorar el uso de embarcaciones de alta velocidad para dar respuesta en este tipo de situaciones. Para ello, el Military Sealift Command decidió alquilar a la empresa constructora del Jervis Bay, la australiana Incat, tres catamaranes de alta velocidad que servirían como prueba de concepto para el desarrollo de los Joint High Speed Vessels (JHSV) de la clase Spearhead: el USS Joint Venture (HSV-X1), de 2001 a 2006; el USAV Spearhead (TSV-X1), de 2002 a 2005; y por último el HSV-2 Swift, de 2003 a 2013.

Construido en tan solo diez meses en las instalaciones de Incat en Tasmania (Australia), el HSV-2 Swift fue entregado al Military Sealift Command a finales del año 2003, y trasladado posteriormente a su puerto de operaciones, la base naval de Little Creek en Norfolk, Virginia. Los casi cien metros del HSV (High Speed Vessel, buque de alta velocidad en español) estaban fabricados integramente en aluminio, con un diseño wave-piercing que le permitía atravesar las olas en vez de remontarlas. Aunque visto de frente adoptaba la forma de un trimarán, sólo los cascos laterales se encontraban dentro del agua, mientras el casco central quedaba suspendido en el aire.

El buque se diseñó como buque de apoyo logístico, por lo cual no incluía armamento pesado, tan solo cuatro ametralladoras Browning M2. Su diseño modular permitía reconfigurar su interior en poco tiempo en función de la misión a realizar. La rampa de popa permitía el acceso a la bodega de carga de vehículos de hasta 12 toneladas de peso. Por encima de ella, la cubierta de vuelo, de 25 por 15 metros estaba preparada para operar con helicópteros del tipo Sikorsky MH-60S, que podían ponerse a resguardo en el hangar de vuelo, con capacidad para dos helicópteros de este tipo.

El buque estaba tripulado por 35 personas, 18 militares y 17 civiles, aunque gracias a su configuración modular podía adaptarse para alojar hasta a 350 personas. Además de los camarotes para la tripulación, el buque contaba con una serie de espacios comunes tales como un comedor para 39 personas, una lavandería, una enfermería, oficinas o un ciber salón. El Swift estaba equipado con dos lanchas rígidas hinchables, una que actuaba como bote de rescate y otra más pequeña. También contaba con dos botes hinchables salvavidas para evacuación con capacidad para 500 personas.

Cuatro motores diésel de 7.200 kW cada uno accionaban los cuatro propulsores a chorro de agua que movían el buque, tanto hacia delante como hacia atrás o en cualquier dirección. El uso de propulsores a chorro en lugar de hélices y timones permitía al Swift navegar en aguas de tan solo 3,7 metros de profundidad. El buque era capaz de alcanzar velocidades de 35 nudos, con una autonomía a esa velocidad de 1.100 millas náuticas (2.000 km), distancia que aumentaba hasta las 4.000 millas náuticas (7.500 km) navegando a 20 nudos.

El Swift entró al servicio de la marina de los EE.UU. en julio de 2003 como parte del comando antiminas, e inició un recorrido que lo llevó por el golfo Pérsico, la costa Africana y europea hasta el mar del Norte, para finalizar en Hawaii en menos de un año. En cuanto las misiones antiminas finalizaron, el buque fue utilizado en labores de colaboración con otras marinas y en tareas de ayuda humanitaria.

En enero de 2005 el Swift fue enviado desde su base en Texas hasta Tailandia para prestar ayuda tras el tsunami del sudeste asiático de diciembre de 2004. Posteriormente, el buque transportó víveres y agua a las poblaciones aisladas por carretera de la costa del Golfo de México tras el paso del huracán Katrina. Durante el conflicto entre Israel y el Líbano en 2006 el Swift fue utilizado para transportar material de ayuda humanitaria entre Chipre y Beirut.

El contrato de cinco años de duración de alquiler del Swift fue renombrado en 2008 por cinco años más, esperando la entrada en servicio de los Joint High Speed Vessels. Al finalizar esta extensión, el buque fue reemplazado por el USS Spearhead y devuelto a Incat hasta julio de 2015, cuando entró en servicio en la marina de los Emiratos Árabes Unidos.

El 1 de octubre de 2016, el Swift fue alcanzado por un misil lanzado por combatientes del movimiento popular yemení Ansarolá, según ellos mismos anunciaron. Aunque en un primer momento el gobierno emiratí negó el ataque y cualquier tipo de víctima, finalmente, tras divulgarse un video del mismo, acabaron por reconocerlo y cifraron el número de víctimas mortales en 22 personas.

Características generales.

Eslora: 98 metros
Manga: 27 metros
Calado: 3,4 metros
Potencia instalada: 28.800 kW
Velocidad máxima: 45 nudos
Velocidad de crucero: 30 nudos
Tripulación: 35 personas

Para saber más:

– Página web de Incat.

– Página web y perfiles en Twitter, Facebook y LinkedIn de la US Navy.

– HSV-2 Swift (High Speed Vehicle), United States of America, en naval-technology.com

---

Un artículo de Juan A Oliveira. Si te ha gustado la entrada, puedes seguir el blog por Twitter, Facebook  o correo electrónico (búscalo más abajo),  para recibir las actualizaciones semanales.