En el cambio de década entre los años 50 y los años 60 del siglo pasado, nadie trazó las expectativas del futuro americano como Arthur Radebaugh, el ilustrador creador de las populares viñetas de Closer than we think! (“¡Más cerca de lo que pensamos!”).
Radebaugh (1906–1974) había comenzado su carrera como ilustrador comercial en Detroit, en donde comenzó a experimentar com una imaginería que incluía rascacielos fantásticos y coches futuristas, que él mismo describió como “a medio camino entre la ciencia ficción y diseños del mundo actual”.
Pero su carrera dió un giro radical a mediados de los cincuenta. La fotografía tomó el lugar de las ilustraciones en la publicidad, y los servicios de Radebaugh eran cada vez menos solicitados. Radebaugh tuvo que reinventarse y encontró su lugar con la viñeta dominical Closer than we think!.
Publicadas por primera vez el 12 de enero de 1958 (pocos meses después del lanzamiento del Sputnik) con una imagen de una estación espacial, las viñetas de Radebaugh acercaron durante cinco años situaciones de la vida diaria enriquecidas por tecnología futurística: carteros con jet packs, aulas con escritorios llenos de botones, almacenes ordenados por robots. En su máximo apogeo, sus imágenes llegaron a 19 millones de lectores en Estados Unidos y Canadá.
Tras su muerte en 1974, su trabajo quedó en el olvido durante varios años. El documental Closer Than We Think del director Brett Ryan Bonowicz, presentado el año pasado, recupera su memoria y explora su legado.
A continuación, puedes encontrar algunas de las imágenes de Radebaugh de temática marina publicadas en Closer than we think!, más cerca de lo que pensamos de algunos conceptos o realidades del mundo actual.
«El Carguero Atómico. Dentro de poco, gracias a la era atómica, buques de carga de alta velocidad surcarán nuestros océanos sin tripulación y transportarán automáticamente las mercancías entre puertos mucho más rápido y barato de lo que es posible hoy en día. La Maritime Commission ha mostrado su interés en la automatización del transporte marítimo concediendo a la División Norte de United Aircraft un contrato para estudios preliminares. ¿Qué podemos esperar? Esto es solo un concepto: un buque hidroala atómico, de tal manera que su combustible nunca se agote y pueda mantenerse en el mar indefinidamente. Aviones llevarán la carga hasta el barco mientras este está en alta mar, lejos de los puertos. Aterrizarán en su cubierta y descargarán las mercancías que serán transportadas a su destino, eliminando el manejo de estas en el puerto y los costes de almacenaje.»«Submarinos fueraborda. ¡Los pescadores de las profundidades del mañana serán capaces de llevar su caza hasta las profundidades! Nuevos tipos de motores fueraborda harán posible un nuevo tipo de vehículo deportivo, un mini submarino barato y fácilmente maniobrable, presto para la acción. La idea del motor fueraborda sumergible no está tan lejos como puedes creer. La compañía Scott-Atwater Manufacturing ha desarrollado planes para fabricar este mecanismo, propulsado por un pequeño disco rodante similar a un pequeño platillo volante. El aire expulsado a alta velocidad por las aberturas traseras generará la propulsión. Por debajo del nivel del mar, los propulsores a chorro de agua serán incluso más efectivos.»«El yate del pobre. El lujo de tener un yate podría llegar a casi todo el mundo en el mundo del mañana. La producción en serie de cascos de plástico de bajo coste será posible mediante el uso de pistolas que espolvorearán el plástico, similares al «depositor de resina de fibra» concebido por la Rand Development Corporation. El coche familiar se utilizará como medio propulsor. Cuando el patrón del futuro meta su auto en la embarcación el motor ocupará su lugar. Las ruedas traseras descansarán sobre un rodillo unido a la hélice. ¡El conductor meterá una marcha, pisará el acelerador, e inmediatamente estará navegando en su yate!«Robots para el fondo marino. Un «robot araña» diseñado para caminar sobre el fondo marino está siendo proyectado para la Oficina de Investigación Naval por la compañía Jered Industries, de Hazel Park (Michigan). Una versión preliminar ya ha sido probada en el Pacífico en La Jolla, cerca de Los Ángeles. Se trata de una especie de tanque submarino, con largos brazos, cámara de televisión y otros artilugios. Recogerá muestras del fondo marino, analizará la topografía, comprobará que no existen obstáculos para cables o líneas de amarre, etc, así como llevará a cabo otras tareas que hoy en día no pueden ser controladas desde tierra.» «El mercancías marino. Gracias al desarrollo de los submarinos atómicos, en el futuro podrá transportarse el petróleo y otras cargas líquidas a través del océano de una manera totalmente nueva. Como vemos aquí, el método incluye el uso de «rolli-tankers», originalmente creados por Goodyear para el transporte del Ejercito. Estos son enormes cisternas con forma de neumático, hechas para ser arrastrados detrás de un camión. Los ingenieros afirman que los «rolli-tankers» podrían ser rediseñados para ser arrastrados por el agua por un submarino atómico, como un tren de mercancías. Al viajar bajo la superficie de serían inmunes a las mal tiempo, etc. Una vez en puerto, los «rolli-tankers» marinos podrían ser llevados a tierra y arrastrados a su destino final.«Fin de semana tropical. Los viajeros del mañana podrán hacer cruceros a su antojo gracias a un nuevo tipo de buque vacacional. Aviones a reacción los transbordarán a un crucero que navegue siempre en el lugar con mejores condiciones climáticas. Este crucero de lujo podría estar construido con la forma de un catamarán, tal y como ha desarrollado Gar Wood. Entre las cubiertas habría una zona amplia y estable para el aterrizaje. La propulsión atómica permitirá al buque mantenerse en el mar lejos de tierra durante años. Los vacacionistas disfrutarán de la vida a bordo allí donde elijan.»
Juan A Oliveira es Ingeniero Técnico Naval por la Universidade da Coruña y MBA por la UNIR. Desde 2013 edita y coordina el blog de temática naval vadebarcos.net. Puedes conectar con él a través de Twitter o LinkedIn.
Si te ha gustado la entrada, puedes recibir las nuevas entradas del blog en tu correo electrónico en el botón de abajo. Además, puedes seguir toda la actualidad del mundo de los barcos en el Twitter o el Flipboard de Vadebarcos.
Pingback: El retrofuturismo marino de Klaus Bürgle | VA DE BARCOS